Con la boquita partía de Irene B. Trenas
Nº de páginas: 210
Editorial: Editorial Cerbero
Idioma: castellano
Encuadernación: rústica
Edición: 2023
Terror rural
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¿Terror patrio? Yo digo sí. Cerbero es de las pocas editoriales que, con sus autores y autoras, apuestan por ello y continúan siendo los más originales a la hora de trasmitirnos sus historias.
Hoy os voy a hablar de Garrique, un pueblo chiquito y muy bonito, donde las verbenas, las abuelitas chismosas y las tortillas de patatas y croquetas están a la orden del día, hasta que todo se tuerce, cuando se vuelve a hablar del Mellao. El hombre más oscuro y mezquino que vivió aquí.
Una obra cortita, costumbrista, llena de toques de horror, abuelas marikas todopoderosas y un misterio que se resuelve de la manera más sangrienta y terrible posible. Me la leí de una sola sentada, ya que era imposible separarme del libro con la portada más grimosa que he visto nunca. ¿La habéis visto? Agrandad la foto y mirad bien esa portada. Queda todo dicho.
Ese ambiente rural, que puede pasar de ser megatranquilo y tradicional a una masacre en una noche de la verbena. Me gusta que se nos vuelva a hacer ver que los monstruos no son aquellos que tienen cuernos, sino los que viven justo frente a nuestra casa. Y es horripilante de darse cuenta.
Los diálogos son lo más andaluz que hay, me he sentido como en casa.
Una historia costumbrista en la que el mayor de los horrores cae sobre un apacible pueblecito.
Corred a leerlo, es que no puedo decir otra cosa.
Leo Shaddix
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Garrique es un pueblo pequeñito al norte de Andalucía que vive asentado en la rutina. Pero, como todo pueblo, tiene un pasado y pesa sobre él la leyenda de uno de sus habitantes, el Mellao.
La repentina llegada de un extraño removerá el pasado, con sus fantasmas y sus monstruos, y agitará el ánimo de todas las vecinas y vecinos. ¿Lograrán sobreponerse a ello un cuarteto de septuagenarias, el dueño de un bar con solera y un puñado de garriqueños que solo buscaban una vida tranquilita?